Reducción de Mamas

También llamado gigantomastia cuando hay un marcado crecimiento de la glándula mamaria. Con este tratamiento se consigue mejorar la forma y la proporción de la glándula. Con la reducción mamaria se consigue mejorar la forma y la proporción de la glándula, además de la elevación del complejo areola-pezón y dar un aspecto juvenil de la mama. Se llama hipertrofia mamaria o gigantomastia cuando hay un marcado crecimiento de la glándula mamaria, que lleva a cambios posturales y dolor sobretodo en la espalda, deformidad de los hombros por el peso que sujetan y alteraciones de la piel, dermatitis, falta de armonía con el resto del cuerpo e incluso limitación de la actividad física y deportiva. Las cicatrices se sitúan una alrededor de la areola, otra vertical que llega al surco submamario y otra horizontal en el surco submamario (T invertida). En algunos casos es suficiente con la cicatriz en la areola y la vertical. El resultado es satisfactorio y permanente. La cirugía se realiza con anestesia general, la duración es de 3 horas aproximadamente. El postoperatorio no es doloroso, la inflamación aparece los 3 primeros días y se puede reincorporar al trabajo a partir de los 7 días, y al deporte 1 mes después de la intervención. Como en cualquier otra cirugía, puede presentarse complicaciones poco frecuentes como el sangrado, seroma, infección, y perdida de la piel o parte de la areola, sobre todo en las fumadoras por alteraciones de la vascularización y disminución de la sensibilidad de los pezones, que se vuelve a recuperar. Las cicatrices suelen tomar un color rosado inicialmente pero va tomando un color nácar con los meses.